Una merienda dulce

¿A qué cuando eras pequeño más de una vez para merendar tenías un panecillo al que le metías una barra de chocolate por una punta y la sacabas por la otra y ya tenías ese bollo relleno (sin pegatina) que ahora se vende por todos lados?

La bollería industrial ha sustituido en muchos casos las “meriendas dulces” que les damos a los más pequeños cada día, ya sea por comodidad o por que este tipo de productos incluyen “regalitos” que llaman la atención de los más pequeños y pequeñas de la casa.

Pero ten por seguro que las meriendas dulces más tradicionales son las menos perjudiciales para tu hijo/a o nieto/a… siempre será más sano una rosquilla de las que hacemos que esa que venden desde hace años empaquetada individualmente o de dos en dos o incluso en pack de media docena y que incluyen todo tipo de conservantes y potenciadores de sabor artificiales. De verdad quieres que eso se lo coma tu pequeño/a?

Y si pasas por cualquiera de nuestras pastelerías en Campos o Palma y les llevas para merendar una rosquilla, o una rosquilla bañada en chocolate, o una palmera recién hecha o una coca de crema… o incluso ese “panet” para luego meterle la barra de chocolate dentro como hacías tú.

Si tu disfrutabas de esto, por qué no dejas que los tuyos lo hagan? Recuperemos lo bueno de nuestra infancia para dársela a los que ahora viven esa niñez.