Una de las frases que más oímos y repetimos durante estos días es «cuando todo esto pase», y a continuación hacemos nuestros planes, nuestros deseos, todo lo que vamos a hacer y que no hemos podido llevar a cabo en esta cuarentena.

Dicen algunos expertos que cuando todo esto pase no seremos los mismos, que cambiarán nuestros hábitos, nuestra manera de organizarnos, de relacionarnos con los demás, en definitiva, nuestra manera de vivir. Esperemos que no sea para tanto y que, en cualquier caso, conservemos las buenas prácticas que en nuestra sociedad han surgido estos días, como la solidaridad, la generosidad y la empatía.

De lo que podemos estar seguros es de que cuando todo esto pase, el mundo necesitará a los pasteleros y pastelerías más que nunca para volverse a encontrar con la felicidad. Para celebrar los aniversarios perdidos, y las bodas y comuniones aplazadas, para alegrarnos de que seguimos adelante, y para que, esperemos que pronto, recordemos todo esto como un mal sueño.

Fuerza! Ya queda menos!